¿Cómo hacer el mantenimiento de las celosías de lamas de aluminio?

Mantenimiento de las celosías de lamas de aluminio

Las celosías de lamas de aluminio son una excelente solución para el control de la luz solar en la casa, proporcionan una excelente protección y están diseñadas para resistir las inclemencias del tiempo. Para asegurar que siempre funcionen adecuadamente, se recomienda hacer un mantenimiento regular de sus componentes. A continuación, vamos a explicar los pasos principales para realizar un mantenimiento adecuado de sus celosías de lamas de aluminio.

Revisión visual de los componentes

El mantenimiento de las celosias es sencillo y rápido

El primer paso del mantenimiento de las celosías es hacer una revisión visual del estado de los componentes de la celosía.

Esto nos permitirá detectar rápidamente obstrucciones, zonas con acumulación de polvo o suciedad, sin tener que forzar los mecanismos.

Éste paso debe hacerse mensualmente, ya que apenas nos tomará unos minutos, y es un sistema muy efectivo de detectar fallas en fases tempranas. 

Para ésta fase, no se necesitan herramientas y recomendamos prestar atención a los anclajes de las lamas y a las fijaciones.

Limpiar la celosía con agua dulce y detergente suave

A continuación, es importante asegurarse de que las lamas estén limpias y que no se acumule salitre u otros contaminantes sobre la superficie de las lamas.

Para ello, recomendamos la limpieza regular de las celosías con agua dulce, y el lavado de las superficies con agua jabonosa al menos una vez al año. Nuestras celosías están compuestas por materiales de alta resistencia, a los que éstos productos no causarán daño.

Éste proceso para el mantenimiento de las celosías puede hacerse manualmente, con un cubo de agua y un paño (es importante que nos aseguremos de cambiar el paño regularmente, para evitar arañar la capa exterior de las lamas con los restos acumulados), o de manera automática con una lavadora a presión, siempre y cuando se utilice el nivel de presión más bajo y se use un difusor, para que el agua no salga proyectada con mucha potencia.

Lubricar las partes móviles con aceite multiuso

Otra clave del mantenimiento de las celosías es la aplicación de lubricantes multiuso en las partes móviles de una celosía de aluminio, no sólo para reducir la fricción sino también para arrastrar la suciedad y limpiar  zonas de difícil acceso (sobre todo en el caso de los lubricantes en spray).

Recomendamos prestar especial atención a los sistemas de accionamiento, y los ejes de pivotado de las lamas, que son las zonas que más desgaste pueden llegar a sufrir.

En caso de lamas verticales, el pivote inferior es el que más carga resiste

En caso de lamas horizontales, los pivotes ubicados en ambos laterales resisten la misma carga. 

Protección y ventilación con rejillas de Aluminio

Las celosías de lamas también se pueden utilizar para ocultar huecos con necesidades de ventilación, como el respiradero de un garaje, un tendedero de ropa, una terraza, etc.

En éstos casos, es importante recordar que las celosías no están diseñadas para resistir cargas adicionales, de modo que debe evitarse colgar cosas de las celosías (ropa, cuerdas, etc.) ya que pueden provocar estrangulamientos en el caudal de aire, o sobrecargas de viento.

Adicionalmente, verificaremos que no hay obstrucciones entre las lamas (hojas, suciedad etc..) y que no hay elementos extraños adheridos.

Qué hacer si detectamos daños en una celosía

Si durante cualquiera de los pasos anteriores detectásemos un deterioro, desnivelado de la celosía o desprendimiento de alguna de sus partes, recomendamos hacer una fotografía y contactar con el fabricante. Con ésta información, el fabricante le asesorará acerca de la mejor forma de solucionarlo. Para identificar el fabricante, busque en los accionamientos o los testeros, puntos en los que suele estar indicado su nombre.

Conclusiones

Las celosías de lamas de aluminio son un producto duradero, seguro, y práctico de mejorar la eficiencia energética de las edificaciones. El mantenimiento preventivo es una herramienta sencilla, rápida y económica de prolongar la vida útil del material, manteniendo su estética atractiva. La revisión ocular, sumada a la limpieza regular de las superficies, atajan los problemas antes de requerir sustituciones y suponen un ahorro económico a largo plazo. En caso de detectar daños en las celosías, recomendamos contactar con el fabricante y seguir sus indicaciones.